En los recovecos virtuales de la web de la fundación Ego de Kaska, en medio de la turbulenta pandemia de coronavirus que nos asediaba en el año 2021, se alzaron ensayos que hoy, como destellos del pasado, se congregan en este libro. Escritos bajo el misterioso seudónimo de El Coloso de Rodas, surgieron como una conmovedora reminiscencia, un eco provocado por la lectura apasionada de la obra de Saint-Exupéry, El Principito.
¿Acaso la literatura no es un río que fluye en constante evolución? Así, ese mismo año, Ediciones Exodus presentó al mundo su edición de El Principito, –ilustrado por el artista cubano residente en Madrid, Felipe Alarcón Echenique–. En torno a tan icónico relato, las palabras cobraron vida para hablar sobre la experiencia de sumergirse en sus páginas, que trascienden el tiempo. Incluso sin el tradicional aparato de referencia a pie de página, una esmerada lista bibliográfica consultada fundamentó la exploración intelectual, nutriendo el alma de cada ensayo. Sin embargo, queda en manos de los lectores discernir cualquier valor literario y acoger con sabiduría las reflexiones que surgen de estos escritos sobre uno de los autores más aclamados de la literatura mundial.
El irónico y pragmatista Richard Rorty sostenía la idea de que cualquier teoría filosófica podía comprobarse mejor en relación con la literatura. Acuñó la noción de que la filosofía venía a ser un género literario en el contexto de la postmetafísica y la deconstrucción. Sin embargo, este no era el caso del narrador Exupéry ante la filosofía. A pesar de ello, en el autor de Vuelo nocturno, se interesaba por los conceptos más arraigados de la metafísica: Verdad, Dios, Razón e Inmunidad. Junto a la metafísica, la literatura se convertía en un relato para explicar las razones del ser humano en el mundo.
No nos atrevemos a atribuir méritos, pues somos simples arqueólogos de las letras, buscadores incansables de la verdad en las palabras que moldean nuestro ser. Nuestra misión y propuesta, en este rincón de la ascetología literaria, es mantener viva la llama del conocimiento y la pasión por la escritura, honrando así el legado que escritores como Saint-Exupéry dejaron grabado en el firmamento de las letras.
A través de estos ensayos, en la conjunción de sensaciones y pensamientos, encontramos un camino hacia la comprensión, la introspección y el crecimiento. Es nuestra esperanza que estas palabras, libres como aves en vuelo, encuentren refugio en los corazones curiosos y aviven la llama de la imaginación y el amor por la literatura.