Por ACADEMIA DE LA HISTORIA DE CUBA EN EL EXILIO
La Junta Directiva de la Academia de la Historia de Cuba en el Exilio, a nombre de todos sus miembros y colaboradores, se une al luto de la Cuba eterna por el fallecimiento de uno de sus más firmes y destacados hijos: Juan Manuel Salvat. Cristiano de fe y práctica cabal, patriota de ideas y acción sin treguas, hombre de armas y almas tomar, deja una huella de amor infinito en todos los que tuvimos el honor de conocerlo y trabajar con él. Como decano de los editores cubanos del Exilio, su labor incansable por salvaguardar lo mejor de la cultura cubana allende los mares, lo había convertido en puerto seguro de las letras desterradas que de la Patria nunca se han ido del todo. De mente y corazón abiertos, jamás fue sectario más que del amor a Cuba, Dios, la familia, y a todos cuantos tocaban a sus puertas en busca del reposo del guerrero que bien sabía del doloroso peso sublime de llevar en sí el decoro de muchos cuando había muchos sin decoro.
Nuestras condolencias a su familia, que eran parte indisoluble de su persona, sus luchas, sus logros y sus tenaces esperanzas por Cuba siempre. Que en la Paz del Señor descanse.
Dr. Octavio de la Suarée, presidente. Dr. Eduardo Lolo, secretario.
También te puede interesar
-
El escándalo de «Comedian» o la paradoja de un arte efímero
-
Donald Trump y el escritor Michel Houellebecq. ¿Qué es ser un buen presidente? Reflexión post-electoral en clave libertaria
-
Una conversación con Julio Benítez
-
Histeria Post-Electoral: La Crisis de Madurez en la Era de la Politización Emocional
-
1959. Cuba, el ser diverso y la Isla imaginada